La rapera Cardi B, cuyo nombre real es Belcalis Marlenis Almánzar, ha sido oficialmente absuelta de toda responsabilidad en el juicio civil que enfrentaba por una acusación de agresión ocurrida en 2018. El veredicto, emitido el 2 de septiembre de 2025 por un jurado en Los Ángeles, marca el cierre de un proceso legal que se extendió por años y que amenazaba con empañar la imagen pública de la artista.

La demanda fue presentada en 2020 por Emani Ellis, una ex guardia de seguridad que alegaba haber sido atacada por Cardi B en un consultorio médico de Beverly Hills. Según Ellis, la rapera —entonces embarazada de cuatro meses— le habría escupido, insultado con términos racistas y arañado el rostro con sus uñas largas, provocándole heridas que requerían cirugía plástica.

Durante el juicio, Cardi B negó rotundamente haber tenido contacto físico con Ellis. “Juro por Dios, lo diré en mi lecho de muerte: no toqué a esa mujer”, declaró a la salida del tribunal, visiblemente aliviada. Su equipo legal argumentó que el altercado fue verbal y que Ellis se acercó de forma agresiva intentando grabarla, lo que generó una discusión que fue detenida por el personal médico.

El jurado concluyó que no existían pruebas suficientes para sostener las acusaciones de agresión, negligencia o daño emocional, desestimando así la demanda de 24 millones de dólares que Ellis había interpuesto. La artista, quien se encuentra en medio del lanzamiento de un nuevo álbum, lamentó haberse perdido el primer día de clases de sus hijos por asistir al juicio, pero agradeció a sus abogados, al jurado y a sus seguidores por el apoyo constante.

Cardi B también lanzó una advertencia a quienes consideren presentar demandas infundadas en el futuro: “Esta vez fui amable, pero la próxima vez voy a contrademandar y haré que paguen”.

Este fallo no solo representa una victoria legal para la intérprete de “WAP”, sino que también refuerza su postura frente a la exposición pública y los límites de la fama. Aunque el abogado de Ellis ha anunciado que planean apelar el veredicto, por ahora, Cardi B puede respirar tranquila: la justicia le ha dado la razón.