El Estadio Morumbi de São Paulo vivió una noche mágica durante la presentación de Dua Lipa en Brasil. En un gesto que sorprendió y emocionó a su público, la artista británica decidió rendir tributo a la rica herencia musical de Brasil interpretando “Magalenha”, una canción cargada de ritmo, percusión y la energía del carnaval.

Lo más poderoso del momento fue la colaboración con Carlinhos Brown, figura emblemática del samba y la música afrobrasileña. Juntos, llevaron la canción a otro nivel: él con su presencia genuina y ella con una entrega total, demostrando respeto y pasión por la cultura que estaba celebrando.

Dua también invitó otro grande al escenario: Caetano Veloso. Con él interpretó “Margarida Perfumada”, un tema clásico que redondeó una experiencia única de fusión entre generaciones. Este gesto no solo fue un guiño musical, sino también un puente de diálogo entre estilos tan distintos como complementarios.

Para cerrar esa noche intensa, Dua escribió en sus redes expresando su gratitud: mencionó lo honrada que se sentía por compartir escenario con Carlinhos Brown y Veloso, y cómo la energía de sus fans brasileños hizo que ese show fuera inolvidable. Más que un concierto, fue una celebración del mestizaje cultural, una declaración de amor a Brasil y una prueba más de que el pop puede abrazar raíces profundas con elegancia y autenticidad.