
A sus 74 años, Jane Seymour volvió a demostrar que la edad no es un límite para la elegancia ni la vitalidad. La icónica actriz británica, recordada por su papel en Dr. Quinn, Medicine Woman, sorprendió a sus seguidores al compartir una imagen en traje de baño rojo desde las costas de Cerdeña, en el marco del Filming Italy Sardegna Festival.
Con una sonrisa serena, sombrero de paja y gafas oscuras, Seymour posó frente al mar con los brazos abiertos, celebrando el solsticio de verano con una naturalidad que solo otorgan la experiencia y la autenticidad. “Dosis de vitamina mar: ¡tomada!”, escribió en sus redes, acompañando la publicación con un mensaje lleno de alegría y conexión con la naturaleza.
Más allá del impacto visual, su aparición fue una declaración de principios: vivir el presente, abrazar el paso del tiempo y mantenerse activa física y emocionalmente. La actriz, que también ofreció una clase magistral a estudiantes de cine durante el festival, compartió que su rutina de bienestar incluye pilates, caminatas, una dieta mediterránea rica en vegetales frescos y un cuidado riguroso de la piel.
Seymour, madre de cuatro hijos y abuela orgullosa, continúa trabajando con intensidad y pasión. Su papel en la serie Harry Wild ha marcado una nueva etapa en su carrera, demostrando que el talento no se jubila y que la reinvención es posible a cualquier edad.
Con esta aparición, Jane no solo reafirma su estatus como ícono de estilo, sino que inspira a generaciones enteras a vivir con plenitud, autenticidad y elegancia. Porque si algo ha dejado claro es que la belleza, como ella misma dice, es cuerpo, mente y espíritu.